El Instituto Nacional del Agua (INA) y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) prevén que el trimestre invernal —junio, julio y agosto de 2025— se caracterice por precipitaciones superiores a las normales en la provincia de Entre Ríos. Así lo indica el último boletín de perspectivas hidroclimáticas, que anticipa un incremento en los milimetrajes típicos para esta época del año.
De acuerdo con el informe técnico, las lluvias superarían el promedio histórico, que en este período oscila entre los 50 y 200 milímetros, lo que podría traducirse en una mejora en la disponibilidad de agua en distintas zonas del territorio provincial. Esta situación beneficiaría tanto al abastecimiento para consumo humano como a las actividades agropecuarias e industriales.
Ríos en recuperación y nuevas perspectivas
En relación con los principales cursos de agua, el río Paraná muestra una recuperación progresiva con niveles medios bajos, impulsada por el aporte sostenido del río Paraguay y una mayor afluencia desde sectores aguas arriba. Esta tendencia, según los especialistas, podría continuar durante las próximas semanas dependiendo del comportamiento meteorológico regional.
Por su parte, el río Uruguay se mantiene en niveles de aguas medias a medias altas, con posibilidad de nuevos repuntes en el corto plazo. Este comportamiento responde al ingreso de frentes húmedos y al aumento del caudal de afluentes en el tramo medio y en el área de influencia de la represa de Salto Grande.
Planificación hídrica y monitoreo constante
El director de Hidráulica y Obras Sanitarias de Entre Ríos, Oscar Pintos, subrayó la relevancia de estos pronósticos para la gestión de los recursos hídricos en la provincia. “Estos informes nos permiten proyectar un panorama más exacto para la gestión hídrica. El sostenimiento de los caudales, especialmente en el Paraná y el Uruguay, junto con las precipitaciones previstas, refuerzan la necesidad de un monitoreo constante y una planificación ante eventuales escenarios”, afirmó.
Asimismo, Pintos destacó el trabajo conjunto que se realiza con el INA y el SMN para el seguimiento continuo de las condiciones hidroclimáticas y la adopción de medidas preventivas frente a posibles contingencias.
