Entrevista a Omar Acosta, especialista en intervenciones psicosociales y presidente de la Agrupación Discapacidad y Adultos Mayores de Entre Ríos
¿Qué significa la creación de OSER para el sistema de salud en Entre Ríos?
La sanción de la nueva ley que da nacimiento a OSER (Obra Social de Entre Ríos) representa un momento clave para quienes, durante años, reclamaron cambios profundos en la salud provincial. No se trata solo de un cambio de nombre: es una esperanza renovada para miles de ciudadanos, en especial para las personas con discapacidad y los adultos mayores.
¿Cuál fue el problema con IOSPER que justificó esta transformación?
Durante décadas, IOSPER fue objeto de constantes reclamos por parte de sus afiliados. Las demoras en las prestaciones, los sobreprecios en prótesis, la interrupción de internaciones domiciliarias —incluso en pacientes electrodependientes—, y la falta de una gestión sensible, deterioraron la calidad de vida de quienes más dependen del sistema.
Uno de los puntos más críticos fue la falta de continuidad en los servicios para personas con discapacidad, lo que vulneró derechos garantizados por leyes nacionales como la 24.901. La conducción sindical al frente del IOSPER no logró dar respuestas a estas demandas.
¿OSER será una obra social gratuita o seguirá requiriendo aportes?
Es importante aclarar que OSER no será gratuita: continuará funcionando con un fondo voluntario, por lo que tendrá sostenimiento económico propio. Sin embargo, su orientación y principios son distintos. No se trata de un beneficio “social” en el sentido de algo asistencial, sino de un sistema de cobertura sanitaria accesible y eficiente, pensado para mejorar la atención a las personas que más lo necesitan.
¿Qué se espera de esta nueva etapa en materia de gestión y funcionamiento?
La creación de OSER abre la posibilidad de contar con un directorio profesional, idóneo y comprometido en temas de salud y discapacidad. Es fundamental que quienes tomen decisiones estén capacitados técnica y humanamente para afrontar los desafíos de una obra social moderna, inclusiva y sustentable.
¿Qué cambios usted considera necesarios para este nuevo esquema?
Desde mi perspectiva, uno de los aspectos más importantes que me gustaría que OSER incorpore es una coordinación eficaz entre profesionales, instituciones prestadoras y organizaciones del sector. Sería fundamental establecer un nuevo orden en el nomenclador de prestaciones, que permita agilizar acuerdos, garantizar derechos y evitar demoras injustificadas. También considero esencial que tanto los jubilados como las personas con discapacidad —sobre todo quienes no son trabajadores activos— tengan acceso a tratamientos adecuados, sin exclusiones ni arbitrariedades. Estas son las prioridades que, como profesional y como ciudadano comprometido, espero que se tomen en cuenta en esta nueva etapa.
¿Cuál es el espíritu que diferencia a OSER de IOSPER?
Mientras IOSPER, aunque se presentaba como “de los trabajadores”, terminó siendo una estructura politizada y alejada de las necesidades reales de sus afiliados, OSER aspira a ser lo opuesto: una obra social centrada en el afiliado, en su salud y en su dignidad. Este es el momento para reconstruir la confianza en el sistema y volver a poner a las personas —especialmente a las más vulnerables— en el centro de las políticas de salud.